Un circuito del vino recorre Cafayate, y ningún turista pasa por aquí sin volcarse en amplias degustaciones en todas y cada una de las bodegas situadas en la ciudad. Bodega La Rosa, Michel Torino, La Banda, Etchart, dedicadas a la producción vitivinícola desde mediados del Siglo XIX, son paradas seguras en este recorrido por el sabor de la uva salteña.
La ciudad de Cafayate, Salta, es reconocida mundialmente por su clima, sus paisajes y la amabilidad de sus habitantes; pero tiene aún otro protagonista destacado: el vino Torrontés. La combinación perfecta entre temperatura y humedad, permite la obtención de uva con un sabor dulce profundo, haciendo de las bodegas de la región, centros de atracción turística que ningún visitante deja de degustar.
Caracterizado como punto central de los Valles Calchaquíes, Cafayate ocupa un lugar estratégico en el que convergen tres provincias: Salta, Tucumán y Catamarca, situación que lo engalana con el aporte de diversas culturas permitiéndole poner al servicio de sus visitantes mucho más que belleza natural. Ubicado aproximadamente 180Kms. al sur de Salta Capital, este “pueblo que lo tiene todo”, como asegura su nombre, presenta en el verano temperaturas primaverales y escasas heladas en invierno, consumando un clima propicio para la curación de enfermedades respiratorias.
Paseos por los viñedos; recorridos informativos por las instalaciones de las distinguidas bodegas; catas de vinos de nivel internacional; compra de exquisitos sabores; constituyen una de las opciones turísticas más características de este punto de la provincia de Salta.
Es que Cafayate es lugar de madure de la cepa del vino Varietal Torrontes, un vino blanco que se distingue por su intenso aroma y sabor frutado. Dicha variedad, que fue traída desde España, ha desaparecido en su país de origen convirtiéndose en una expresión muy particular de estos suelos vallistos.